El pasado jueves, Anabel Pantoja abandonó el plató de «Sálvame» después de que Kiko Hernández intentara «malmeter» en su relación con su prima Isa Pantoja. «Sucio lo que estáis haciendo y mercadeando», se quejó la colaboradora. Perdió los nervios, fue al puesto de dirección y le dijo a Valldeperas que Kiko estaba intentando «meter mierda» con su prima: «No me llames sucia, ni a mí ni a mi familia, para hablar de nosotros te lavas la boca, que gracias a mi familia comes tú mucho», dijo marchándose de plató.
Como suele suceder en el programa, este comportamiento no se ha quedado en una anécdota. Este viernes, «Sálvame» nutrió parte de su escaleta recordando el mismo y dejando que sus colaboradores comenten. Para Kiko Matamoros, ausente durante lo sucedido, fue una «pataleta de niña malcriada». Rafa Mora le dio la razón y aseguró que él jamás trataría así a un compañero. «Lo de ayer me pareció una falta de respeto intolerable», insistió Matamoros. «Ha debido pensar que esto es parte de Cantora», bromeaba el colaborador.
Anabel Pantoja solo ha asumido que ha podido cambiar su actitud en «Sálvame» y asegura que esto se debe a que está en un buen momento personal y con menos miedos en directo. Sin embargo, no es la primera vez que la colaboradora hace una «espantada» tras sus conflictos con Kiko Hernández, y su familia casi siempre ha tenido algo que ver.
Hace no demasiado, el colaborador volvía a reprocharle que desmienta automáticamente todas las informaciones sobre los Pantoja y ella se marchó de plató diciendo: «Si no estáis cómodos conmigo, no vuelvo». Esa vez hablaban de Kiko Rivera. Se trataba de una presunta deslealtad del DJ (luego desmentida), y tanto las informaciones como las pullitas del colaborador molestaron tanto a Anabel que se marchó de plató. En otras ocasiones, por suerte, se lo tomó con mejor humor. Como una vez en la que les dedicó un twerking a sus compañeros de «Sálvame».