Los «exiliados» del «procés» hunden el alquiler en Cataluña
La economía catalana no deja de resentirse de las consecuencias de una crisis política que ha disparado varios grados la temperatura social durante los últimos meses. Turismo, industria, comercio o transporte son algunos de los sectores más afectados, que suman pérdidas multimillonarias. Y ahora un nuevo indicador, el de vivienda, que parecía intocable, también se ha resentido. Las razones hay que buscarlas, además de por la ralentización económica, en causas directas relacionadas con el «procés». La disminución del número de estudiantes de fuera de la región que se matricula en centros educativos catalanes porque prefieren evitar problemas con el idioma, el cambio de sede social de miles de empresas a otras comunidades o la bajada del número de trabajadores foráneos que buscan empleo en esta comunidad por temor a problemas de integración derivados de la presión independentista han empezado a hacer mella en el mercado del alquiler de vivienda.
A consecuencia de ello, las cuatro provincias catalanas suman saldos negativos en el número de alquileres. Mientras en toda España el porcentaje ha subido un 1,95% en lo que va de año, en Cataluña la curva ha sido descendente. En Lérida, las viviendas alquiladas disminuyeron un 4,3%; en Gerona un 3,7% y en Barcelona un 3,4%. Pero la palma se la lleva Tarragona, donde la caída fue de un preocupante 8,4%, sobre todo por el menor porcentaje de alquiler vacacional, según datos de un estudio publicado por Fichero de Inquilinos Morosos.
Precisamente en Barcelona, el precio de la vivienda de alquiler experimentó un descenso del 1,2% en el tercer trimestre, menos acusado que en el conjunto de Cataluña, donde el precio cayó un 2,5%, con lo que ya son dos trimestres consecutivos de bajadas, según datos recopilados por Fotocasa.
Tampoco sale muy bien parada Barcelona en cuanto a rentabilidad del alquiler de viviendas. En el último informe del portal Idealista, sólo tres ciudades –La Coruña (4,6%), San Sebastián (4%) y Orense (4,3%)– tienen un porcentaje más bajo de beneficio que la Ciudad Condal (4,8%), el mismo porcentaje que Gerona. Tarragona se sitúa en un nivel medio (5,8%) y sólo Lérida destaca (7,2%). La más rentable es Santa Cruz de Tenerife (7,3%), mientras que Madrid se sitúa en un 5,2%.