Aniversario de bodas de Mary y Federico de Dinamarca: 20 años de sonrisas y lágrimas

El amor ha inspirado a millones de personas a lo largo de todo el mundo y de la historia. La unión entre la Reina Mary y el Rey Federico de Dinamarca no es una excepción. Cada año, el aniversario de su boda es un recordatorio de su amor duradero y su compromiso mutuo. La historia de amor entre Mary Donaldson, una plebeya de Tasmania, y el Príncipe heredero Federico de Dinamarca es un cuento de hadas moderno que capturó los corazones de personas de todo el mundo. Se conocieron en los Juegos Olímpicos de Sídney en 2000. Después de un romance que resistió la distancia y las diferencias culturales, se casaron el 14 de mayo de 2004, en una ceremonia espectacular en la Catedral de Copenhague. te recomendamos Harry y Meghan en apuros: la Fundación Archewell es declarada como «morosa» Daniella Bejarano Na Xamena: el paraíso secreto de Dani Alves y Joana Sanz Daniella Bejarano Poco se conocía sobre la novia australiana más allá de su profesión como abogada, su ascendencia escocesa y la pérdida de su madre. Sin embargo, para la Reina Margarita, acostumbrada a las novias poco convencionales que su heredero había presentado, Mary Donaldson parecía ser la elección perfecta para ayudar al Príncipe heredero a encontrar estabilidad. Mary se trasladó a Copenhague, donde aprendió danés y protocolo. El 14 de mayo de 2004, vestida con un diseño del modisto danés Uffe Frank y coronada con una tiara y velo sobre un elaborado peinado, se convirtió en princesa mientras el novio derramaba lágrimas al verla entrar en la catedral de la capital danesa. La recepción matrimonial tuvo lugar en el majestuoso castillo de Fredensborg, al cual los invitados llegaron tanto en automóvil como en carruaje. Una amplia carpa fue erigida en los exquisitos jardines del recinto. Una vez allí, se capturó la icónica fotografía de la realeza europea en la escalinata principal, con la presencia de la Reina Sofía, el entonces Príncipe Felipe y la aún periodista Letizia Ortiz , acompañados por otros miembros de la realeza como los Reyes Harald y Sonia de Noruega, Carlos Gustavo y Silvia de Suecia, Paola de Bélgica, Alberto y Carolina de Mónaco, con Ernesto de Hannover; Constantino y Ana María de Grecia, así como Príncipes herederos que en ese momento ya habían ascendido al trono, como Guillermo de los Países Bajos con Máxima, o Felipe de Bélgica con Matilde. Crisis familiar Es importante recordar que a lo largo de sus veinte años de matrimonio, la pareja real ha enfrentado diversas crisis que han sido ampliamente cubiertas por los medios. Una de las más destacadas fue cuando se rumoró que Joaquín, hermano de Federico, estaba enamorado de Mary. La situación se complicó aún más cuando, en 2007, anunció su compromiso con una joven francesa llamada Marie Cavallier, quien compartía nombre y un notable parecido físico con la Princesa Mary. Este evento marcó el inicio de una nueva etapa matrimonial para Joaquín, pero solo dos meses después de su boda, estalló una crisis en el palacio. La revista 'Svensk Damtidning' publicó una fotografía en la que Joaquín y Mary parecían estar a punto de besarse durante una fiesta de gala del Regimiento de la Guardia Real. Aunque el incidente fue pasado por alto por el palacio, fuentes cercanas al matrimonio afirmaron que los rumores afectaron profundamente la relación de los actuales reyes, así como el vínculo entre los hermanos. Desde entonces, la relación entre ellos ha sido bastante tensa. Escándalo mundial Veinte años después de su matrimonio, la atención sobre la pareja real está en su punto más álgido, especialmente tras la publicación de un reportaje el otoño pasado que mostraba al entonces Príncipe Federico paseando por Madrid con Genoveva Casanova . Aunque la Casa Real no emitió comentarios al respecto, han tratado de proyectar una imagen de normalidad, aunque la sospecha sobre su relación ha sido inevitable. Portada revista Lecturas redes Con agendas casi completamente separadas , solo se les ha visto juntos en eventos específicos, como su reciente viaje de Estado a Suecia y el próximo a Noruega, entre otros compromisos concretos. Por eso resulta llamativo que, en lugar de celebrar su aniversario con pompa, los reyes hayan optado por pasar el día trabajando juntos. Quizás sea una estrategia para reafirmar su compromiso con la Corona, especialmente después de críticas recientes por su aparente falta de actividad y los períodos de vacaciones de la Familia Real en los últimos meses. Solo ellos conocen la verdad detrás de las puertas del Palacio.