Las palomitas de maíz, cuando el ansia de masticar salvó al cine durante la Segunda Guerra Mundial
El aroma inconfundible que desprenden los palomiteros desde el otro lado de la taquilla hoy es parte de la experiencia sensorial de acudir a una función. Sin embargo, antes de la Gran Depresión que azotó la economía mundial, era impensable que las salas terminasen siendo algo así como un «merendero». Ya sin olvidar las alfombras de palomitas en el suelo, existía el gran riesgo en el cual las películas mudas perderían el sentido en medio de los sorbos de refresco y el sonoro masticar de los espectadores rumiantes. Читать дальше...