David Mearns, jefe del equipo privado que encontró ayer la avioneta en la que viajaba Emiliano Sala, ha pedido un mayor apoyo económico para continuar con los trabajos que podrían subir el aparato a la superficie. «Es caro, pero ¿qué importa el dinero frente al deseo de dos familias?», explica en una entrevista publicada hoy en el diario «L'Equipe».
Los trabajos de búsqueda dieron resultado ayer, cuando se hizo pública la zona donde se encontraba la avioneta. Las cámaras submarinas pudieron captar, además, al menos un cuerpo dentro del aparato, sin especificar de quién sería.
El barco de Merns, desplegado en la zona del Canal de la Mancha gracias a las aportaciones privadas hechas por la familia del futbolista, se encuentra ahora a la espera de una inyección económica que pueda impulsar el remolque del avión hasta la superficie.
«Es una operación delicada pero posible. Ya se han recuperado aviones en aguas más profundas», explica Mearns. Futbolistas como Leo Messi o Mbappé han contribuido a las labores de búsqueda con grandes aportaciones de dinero. Un consuelo para la familia que, perdida la esperanza de encontrarlo con vida, espera poder recuperar el cuerpo para velarlo.
