La Fura dels Baus lleva a escena la Nueva Normalidad

Si durante el confinamiento ya aprovechó para reinterpretar «Macbeth» en forma de performance colectiva y virtual, La Fura dels Baus sigue tomándole el pulso a los tiempos que corren, puro zeitgeist en tiempo real, para convertir el coronavirus en material escénico. Ese es, de hecho, el punto de partida de «Nueva Normalidad», uno de los dos montajes que la compañía catalana estrenará durante el mes de julio y con el que reflexiona sobre el cambio de paradigma que ha supuesto la pandemia global del coronavirus. «Es un problema que nos ha abierto abierto los ojos sobre el hecho de que al final todos vivimos final en el mismo planeta y no podemos dar la espalda a lo que pasa a miles de kilómetros», explica Carles Padrissa, director de un montaje que podrá verse el 3 y 4 de julio en el Recinte Modernista de Sant Pau dentro de la programación del Cruïlla XXS. «La Fura es un ejemplo de regeneración que siempre ha señalado el camino de la innovación», celebra el director del festival, Jordi Herreruela, a la hora de presentar un espectáculo en el que, con la ayuda de la soprano Alba Pérez Cano y el guitarrista Pep Mendoza, Padrissa aprovecha para presentar la Nueva Normalidad como un «grito unánime para que todo el mundo reme en la misma dirección». En este sentido, el espectáculo traza un paralelismo entre exploradores como Magallanes y el personal sanitario en la crisis del coronavirus. «Todos son exploradores de lo desconocido», subraya la compañía. «No sabemos cuál será la nueva normalidad, pero nos la podemos imaginar«, sentencia Padrissa. »Nueva normalidad«, que tras su estreno en Barcelona pasará por el Hospital de Igualada así como por Galicia y Cantabria, está dedicado a personal de limpieza, equipos científicos, enfermeras, médicos, terapeutas, farmacéuticos, voluntarios, trabajadores sociales y conductores de ambulancia y recaudará fondos para poner fin a la pandemia. El segundo montaje que la Fura prepara para este verano podrá verse los días 17 y 18 de julio y, de momento, lo único que se sabe es que cumplirá a rajatabla con el enigmático título de «Espectacle sorpresa». Nada más. «Las posibilidades son infinitas, el abanico gigantesco y el misterio, inquietante, aflora por todos los resquicios de la probabilidad», anuncia la compañía la tiempo que invita a confiar en la creatividad explosiva furera, tirarse a la piscina y que el destino teja resto«. Así sea.