Cafés, bares, restaurantes, eventos de celebraciones (bodas, bautizos, comuniones), comedores, servicios de comida rápida... Toda la colmena de la hostelería se ha convertido en la provincia de Córdoba en uno de los segmentos de la cesta de la compra general que más ha subido su precio en los dos últimos años (hasta incluso un tercero). Las sensaciones que a veces se pueden tener al repasar la cuenta de uno de estos establecimientos parecen tener acomodo en el dato frío. No hay más que bucear entre la 'cocina' del Índice de Precios al Consumo (IPC) que sirve el INE para constatar que desde finales de 2023 y hasta el pasado mes de noviembre (el último dato oficial existente), los precios de la restauración en general y en todas sus variantes han crecido casi un 12 por ciento en la provincia de Córdoba: el porcentaje más alto de toda España, cuya media general se eleva al 8,3% en este apartado. Lo más relevante del caso es que confrontada esa cifra con lo que la vida ha subido en el conjunto de la provincia cordobesa -y con todos los productos y servicios que se estudian- casi difiere el triple. Esto es, frente al 11,8% que marca la restauración el nivel general en Córdoba está en los dos últimos años en el 4,8% . Siete puntos de diferencia. Sólo la provincia de Zamora se aproxima a los datos del sector hostelero con un 11,7% de aumento. Ni siquiera las mayores provincias en población del país como pudieran ser madrid (8%), Barcelona (7,6%), Málaga (8,6%) o Sevilla (8,1%) se acercan a las cifras cordobesas. Echando la vista atrás otro año más, esto es, la salida de la pandemia a finales de 2022 hasta las postrimerías de 2023 cuando las restricciones se esfumaron y la recuperación empezó ya a notarse , el alza de precios en este sector tan relevante en Córdoba (especialmente ahora en la capital) sumó otro 6,5% de subida lo que sumaría en los últimos tres años un 18,3% de inflación frente al 13,9% de media en España o el 8,7% que marcaría el IPC general en la provincia. Hasta aquí los números. Las explicaciones que vienen de la hostelería son coincidentes casi. Los propietarios de varios establecimientos de la capital consultados por ABC, y que han preferido omitir sus nombres, apuntan al «incremento desmesurado» de capítulos como la materia prima, los servicios fijos de funcionamiento o los costes laborales que se ha producido en paralelo a esa subida que marca el INE en su medidor. Subir el nivel «La pandemia fue una estocada en toda regla de la que nos costó Dios y ayuda recuperarnos, y cuando se logró salir, en circunstancias complicadas, llegaron las crisis energéticas y bélicas que han disparado el coste de muchas materias primas, no sólo en la hostelería, sino en casi toda la economía global», explica uno de estos reputados a este periódico. Costes fijos como la luz, el agua, la basura o hasta el alquiler de los inmuebles cuando existe «están siguiendo un alza muy pareja», apunta otro propietario consultado, «y el gasto en materia laboral sigue subiendo como la espuma, siempre que apostamos por una hostelería regulada y milimétrica», apostilla. «Veníamos de una situación a la baja, respecto a otros lugares de España». Lo cierto es que este incremento de precios en el conjunto de la provincia viene de la mano con el auge que está cogiendo la gastronomía cordobesa como marca promocional y motor de captación de turismo o de nuevos clientes en la propia provincia. «Un nivel que sube y que debe venir acompañado de mejores productos que, obviamente, cuestan más caro», aclara otro de los restauradores consultados. Según el INE, de enero a noviembre los precios han subido un 5,7%, siete décimas más que lo que sucedió en el mismo periodo de 2024. Nuevamente Córdoba encabeza el ránking a punto de cerrar ejercicio con la Navidad , un gran punto de inflexión.
