Ofensiva judicial de los moderadores de Facebook en Barcelona por el impacto psicológico de los vídeos que revisan: «Lo más inhumano que puedas imaginar»

«Lo más inhumano que puedas imaginar». Suicidios, terroristas que perpetran decapitaciones, agresiones sexuales o abusos a menores. Son algunos de los contenidos que día tras día, en jornadas de ocho horas, revisan algunos de los moderadores de Facebook desde la torre Glòries de Barcelona. Algunos de ellos «sufren efectos psíquicos muy severos», explica a este diario el abogado Francesc Feliu , que este viernes ha presentado una querella contra los responsables de la compañía en España, en nombre de algunos de los empleados -no desvela cuántos- que visualizan ese contenido atroz . También contra el grupo Telus , subcontratado por Meta para realizar esa labor. Noticia Relacionada Diario de un optimista estandar Si La internet del odio Guy Sorman «La Ley de Servicios Digitales de la UE permitirá a las autoridades pedir cuentas a las principales redes sociales, en particular sobre la forma en que moderan estas incitaciones a la violencia en sus plataformas. Permitirá, por ejemplo, conocer los algoritmos que usan las redes para moderar el odio o incitar a la polémica rentable» Son más de 2.000 personas las que ejercen como moderadoras de contenido en la capital catalana y, del total de la plantilla, un 20 por ciento está de baja por motivos psicológicos , según ha avanzado 'La Vanguardia' y corrobora el penalista, que alerta que alguno de sus clientes, tras verse expuestos a un contenido tan brutal, incluso han intentado quitarse la vida. La decisión de acudir a la vía penal -ahora un juzgado deberá decidir si admite o no a trámite la querella- llega tras tres años de explorar la jurisdicción laboral en la que, lamenta Feliu, la compañía ha ido retrasando el proceso. Entre otros, recurriendo el origen de algunas bajas por incapacidad. Después de que en 2022, la Inspección de Trabajo de la Generalitat sancionase a Telus por infracción grave, al no haber evaluado los riesgos psicosociales de un trabajador -sanción que la empresa ha recurrido-, y la negativa del grupo a buscar una solución para los afectados, han formalizado la querella por tres delitos: contra los derechos de los trabajadores, lesiones por imprudencia grave y contra la integridad moral . Muchos de ellos siguen ejerciendo la labor que les está costando su salud mental. « No pueden renunciar por motivos económicos », aclara Feliu. ¿Alguien les avisó de a qué se exponían, cuando aceptaron el puesto? «A los más antiguos, los que entraron entre 2018 y 2020, no. A los más recientes, sí», precisa. En todo caso, fue un advertencia genérica. « Moderar contenido violento , pero nadie les explicó que deben ver todo el contenido hasta el final, pese a que en el segundo cinco ya vean que están matando a alguien». El penalista cuestiona que algunas plataformas censuren el pecho de una mujer y no el vídeo de una decapitación A veces, ese mismo vídeo deben visionarlo «de manera repetitiva» ya que vuelve a subirse a la misma plataforma. Lo hace un usuario distinto y toca revisarlo de nuevo. «La red social no es culpable de lo que compartan sus usuarios», precisa el penalista, que asume que moderar esos vídeos «es necesario». «El problema es que no hay una formación previa o una forma de limitar ese contenido violento» . Algo que le resulta incomprensible porque sí sucede en algunas redes que impiden, ya de entrada, « censurar el pecho de una mujer. ¿Pero no una decapitación?» , cuestiona. La asistencia psicológica a los moderadores, según detalla, se limitan a visitas de 40 minutos, «cronometradas», en las que el especialista, básicamente, les escucha desahogarse, y luego les alienta, diciéndoles que la tarea que realizan es « muy importante para la sociedad» . «Luego, vuelta al trabajo». Por este motivo, tras solicitar la incapacidad de uno de los empleados, por su afectación psíquica -proceso aún en curso-, algunos de los afectados recurren de nuevo a los tribunales. Cabe recordar que un proceso similar, tras la demanda de varios moderadores de contenidos en EE.UU., Facebook aceptó en 2020 indemnizarlos con 52 millones de dólares por los daños psicológicos causados .