Tras cerrar el negocio en Estados Unidos y Reino Unido y ser comprada en parte por los inversores Green Swan, Toys «R» vuelve a remontar el vuelo y resurge de sus cenizas en España y Portugal. Frente a las pérdidas de nueve millones del año pasado, la juguetera prevé volver a beneficios y cerrar el año con una facturación 160 millones de euros gracias a un aumento de las ventas de alrededor del 5%, tal y como ha desvelado en un encuentro con los medios el consejero delegado de Toys «R»'Us, Paulo Sousa.
Gracias a la inversión en la reinvención de su formato hacia tiendas experimentales, a la transformación de sus sistema informático y a la apuesta clara por la venta online, la compañía calcula alcanzar el 15% de la cuota de mercado en este sector y duplicarán la plantilla en Navidad con la contratación de 1.500 personas en una campaña en la que esperan un crecimiento exponencial de las ventas. La compañía, que ha abierto seis establecimientos este año y remodelado dos de la red, proyecta la apertura de otros 20 locales en España y Portugal hasta 2020 con una inversión prevista de 25 millones de euros.
En esta línea, Sousa ha destacado la reinvención del negocio en la Península Ibérica frente al cierre al que se vio abocado la compañía en Estados Unidos. «Cuando los fondos compraron la compañía en Estados Unidos metieron casi 7.000 millones de dólares de deuda dentro de la compañía, pero el ebitda de la compañía no era suficiente para cubir la deuda y por tanto, no sobraba para inversión. Por eso, durante 12 años la compañía no pudo invertir y eso significa morir. En contraposición, nosotros hemos invertido muchísimo este año justo porque creemos que la compañía necesita un cambio de imagen y eso no s epuede hacer sin inversión», explica Sousa en declaraciones a ABC.