La enésima búsqueda del cadáver de Marta Calvo acaba sin éxito
La Guardia Civil ha dado por concluida la búsqueda del cuerpo sin vida de Marta Calvo en un pozo ubicado junto a una casa abandonada en la localidad valenciana de Senyera, entre los términos municipales de Manuel y Villanueva de Castellón. Las labores de rastreo finalizan sin éxito pero los agentes del instituto armado confirman que la investigación sigue en curso.
Durante la mañana de este miércoles se ha retomado la búsqueda del cadáver de Marta Calvo, con la participación de cerca de una treintena de efectivos de la Guardia Civil, entre los que se encontraban el Grupo de Rescate e Intervención en Montaña (GREIM), buzos del Grupo Especial de Actividades Subacuáticas (GEAS), perros adiestrados del Grupo Cinológico, así como agentes de Tráfico, Homicidios y de la UCO.
Durante el rastreo de la caseta abandonada, los buzos descendieron hasta el fondo del pozo de sesenta metros de profundidad utilizando un dispositivo mecánico de tracción con cuerda, gracias a la ayuda de los agentes especializados en rescates en montaña.
Asimismo, también se ha grabado con una cámara el interior de la oquedad, al mismo tiempo que un guia canino supervisaba con su perro adiestrado las inmediaciones de la caseta. Tras terminar los trabajos de rastreo, los agentes volvieron a tapiar la puerta que previamente habían derribado para acceder al interior de la misma.
El motivo para retomar las labores de búsqueda del cadáver de Marta Calvo en el término municipal de Senyera fueron las declaraciones de una testigo que observó en su momento a una persona cerca de las inmediaciones de dicha casa «haciendo algo sospechoso».
Los trabajos de rastreo se reanudaron después de dos semanas, cuando se dio por finalizada la búsqueda del cuerpo de la joven en un vertedero ilegal próximo a la localidad de Manuel. En este operativo, los agentes inspeccionaron la cantera de Castellón, situada a unos tres kilómetros de distancia, así como el paraje natural de Font Amarga, la Ermita de Santa Ana en Llosa de Ranes y una zona rural en los alrededores de Villanueva de Castellón.
Respecto al proceso judicial de la investigación, el juez de Instrucción número 20 de Valencia citó a la madre del presunto asesino, Jorge Ignacio, el próximo 15 de octubre, después de que algunas de las acusaciones personadas en el procedimiento solicitaran su testimonio, ya que los forenses detectaron diferentes contradicciones.
La joven desapareció en noviembre de 2019 en Manuel, localidad ubicada en la provincia de Valencia donde residía Jorge Ignacio, después de mantener relaciones sexuales con él. Tras ser detenido, el presunto asesino declaró que la mujer falleció de forma accidental durante un episodio de contactos sexuales y consumo de estupefacientes, y que después descuartizó el cuerpo y distribuyó los restos en contenedores.