PP y Ciudadanos llevan su gresca al Senado: «Vais con Al Capone»

La relación entre el PP y Ciudadanos está llegando a niveles insoportables. Los dos socios de investidura de Mariano Rajoy han trasladado este jueves su refriega a la comisión de investigación del Senado, donde los populares trataban de hurgar en las finanzas del partido de Albert Rivera, pero han pinchado en hueso en medio de una bronca monumental. Tal ha sido la tensión que el diputado de Cs Toni Cantó, que acudía de visitante acompañando al tesorero, ha comparado al PP con «Al Capone». Un senador del PP le ha mandado callar, llamándole «macho alfa» enviado al Senado, según los populares, para «reventar» la comisión. Lo cierto es que la sesión se ha cerrado sin que el PP haya logrado rascar más allá de las irregularidades plasmadas en el último informe del Tribunal de Cuentas sobre la contabilidad de 2014 y 2015 de Cs. Fuera, Cantó ha asegurado que la comisión es «un circo» del PP para distraer de la investigación sobre la caja B de Génova en el Congreso. «A los suyos hay que sacarlos de la cárcel para que declaren», ha respondido sobre la intención anunciada del PP de llamar a declarar al secretario general de Cs, José Manuel Villegas, y al propio Albert Rivera. Los populares han acusado a Ciudadanos de «reventar» los trabajos de la comisión del Senado, que dirigen en solitario tras el plante del resto excepto de UPN. «Están nerviosos», ha dicho el portavoz popular, Luis Aznar ha desgranado los motivos esgrimidos por el órgano fiscalizador sobre la contabilidad de Ciudadanos, emitiendo un informe desfavorable. El senador del PP ha recordado que eso les coloca en el mismo saco que Bildu, Aralar, IU y Compromís. Es ahí cuando Cantó ha increpado al PP: «¡Y vosotros vais con Al Capone!». El PP ha acusado al tesorero de tener «una empanada mental» en sus cuentas, mezclando ingresos públicos y privados. Aznar se centró en destacar el presunto trasvase irregular de unos 2 millones de euros procedentes del grupo de Cs en el Parlament hacia el partido y que justificó como «trabajos de asesoría» sin presentar facturas. Los populares ponen ahí el foco de sus sospechas sobre la presunta financiación ilegal en Cs. El tesorero de este partido, Carlos Cuadrado, ha reconocido que en realidad fue una aportación pública. Sin embargo, por la mañana, las dos autoras del informe del Tribunal de Cuentas contrario a Cs quitaron hierro a ese tipo de trasvases, aunque señalaron que existe un «vacío legal». Mientras la ley de Financiación de Partidos Políticos lo permite, la ley de Bases del Régimen Local los restringe. La conclusión fue que el Parlamento deberá legislar. Las dos consejeras se han ceñido a lo que dice el informe: «No refleja la situación financiera y patrimonial al cierre del ejercicio». La bronca ha saltado cuando el tesorero de Ciudadanos sacó a relucir los problemas de corrupción del PP y le acusó de ocultar 25 millones al Tribunal de Cuentas de los grupos municipales. «El problema más principal no es lo que dice el Tribunal de Cuentas, el problema es el dinero que el Tribunal no puede fiscalizar. Usted sabe que durante los últimos 25 años ha emitido informes favorables, y eso no ha evitado los problemas de corrupción», ha señalado Cuadrado, que contraatacó anunciando que presentarán una propuesta de ley para que se obligue a entregar, junto con las del partido, las cuentas de todos sus grupos municipales y autonómicos. Fuentes del PP han señalado después que la ley no obliga más que a presentar las cuentas de las sedes nacional, regionales, provinciales y locales. Pero que en cualquier caso la estrategia de Ciudadanos era desviar el bulto del informe desfavorable. «La realidad es que el Tribunal de Cuentas avala al PP y a Ciudadanos, no», insisten los de Génova.