Hace hoy diez años, el silencio en las calles de Pedreña se podía cortar. Había fallecido Severiano Ballesteros, el vecino más ilustre de su historia y el funeral que atravesó el pueblo sobrecogió a los vecinos y amigos presentes y a los miles de espectadores que lo vieron en directo por televisión. Hoy en día, la villa marinera ha recuperado su actividad de siempre, más animada en verano que en invierno a causa de sus muchos visitantes, aunque con el freno echado a causa de la pandemia. Mas lo que no ha cambiado es la devoción que se le sigue profesando a Seve, el hombre que situó a Pedreña en el mapa del golf mundial.
Incluso ahora, pese a la década...
Ver Más