El pesquero que rescató a 51 migrantes a la deriva: la historia real tras ‘La ley del mar’
La nueva miniserie de RTVE y À Punt recupera la historia del pesquero que en 2006 protagonizó un incidente diplomático entre España y Malta por prestar auxilio a 51 migrantes a la deriva
![La ley del mar](https://www.newtral.es/wp-content/uploads/2024/01/1945703545-FF-BARCOS-PESQUEROS-SANTA-POLA-SHUTTERSTOCK-1024x576.jpg?x97555)
Cuando el pesquero Francisco y Catalina zarpó del puerto de Santa Pola en julio de 2006 para faenar en las aguas del Mediterráneo, nadie a bordo imaginaba que terminarían aplicando la “ley del mar”, concretamente el artículo 10 del Convenio de Salvamento Marítimo, que establece que “todo capitán tiene el deber de prestar auxilio a cualquier persona que se halle en peligro de desaparecer en la mar”.
La ley del mar, miniserie producida por RTVE y À Punt, y dirigida por Alberto Ruiz Rojo, relata cómo los pescadores del Francisco y Catalina llevaron a cabo un improvisado rescate al encontrarse en alta mar una patera varada con 51 personas a bordo, entre ellas una niña y una mujer embarazada. Analizamos en este fact-fiction la historia real tras esta nueva co-producción pública.
La ley del mar: un rescate complicado por la presión diplomática
El 14 de julio, entre las costas de Malta y Libia, el Francisco y Catalina avistó una patera a la deriva cargada de gente. El patrón del barco, Francisco Durá, decidió subir a los migrantes a bordo del pesquero, a pesar de su reducido espacio y provisiones, ante el riesgo de ahogamiento y las condiciones extremas en las que se encontraban tras pasar días en alta mar. Sin embargo, la odisea de estos migrantes aún no había terminado.
Aunque el rescate se realizó en aguas territoriales libias, el puerto más cercano era el de La Valletta, en Malta, y allí se dirigió el Francisco y Catalina para que las personas rescatadas pudieran recibir atención médica. Sin embargo, como se ve en La ley del mar, e informaron entonces medios como El Mundo, las autoridades de la isla se negaron a acoger a los migrantes y obligaron al pesquero a permanecer a 12 millas de distancia de la costa.
Como muestra La ley del mar, a pesar de las gestiones del Ministerio de Exteriores y la Embajada de España en Malta, el pesquero permaneció en esa situación durante una semana, en la que solo pudieron desembarcar una niña con su madre y una mujer embarazada, recibiendo avituallamiento mediante barcos o un helicóptero. Como también informó El Mundo, al sexto día las autoridades maltesas autorizaron el desembarco, pero retiraron el permiso solo 15 minutos después.
Finalmente, España alcanzó un acuerdo de reparto con varios países europeos y africanos, mediado por la Comisión Europea. El acuerdo original preveía que España, Marruecos, Pakistán, Malta,Libia y Andorra se repartieran la acogida de los migrantes rescatados. Sin embargo, el problema estaba aún lejos de resolverse.
El capitán Durá hizo suya las petición de los migrantes de no ser enviados a Libia
La alegría de los migrantes por poder desembarcar del Francisco y Catalina duró poco al saber que algunos de ellos serían enviados a Libia, entonces bajo el régimen de Muamar el Gadafi, donde temían sufrir, algunos de nuevo, violaciones graves de sus derechos humanos.
Como se ve en La ley del mar, y recuerdan a Newtral.es desde la cofradía de pescadores de Santa Pola, a la que pertenecía el barco y por tanto siguió de cerca la operación, José Durá se negó a atracar en La Valeta hasta no tener garantías de que nadie sería enviado a Libia. La negativa de Durá generó otro retraso en el desembarco, pero finalmente, el 21 de julio, el Francisco y Catalina atracó en el puerto de La Valeta, como recogió Europa Press.
La labor humanitaria de José Durá y su tripulación fue reconocida ese mismo año con la concesión de la Orden del Mérito Civil.
Fuentes
Convenio de Salvamento Marítimo
El Mundo
Europa Press
Boletín Oficial del Estado