Fraude electrónico, enemigo del Buen Fin
Izumi Nakamitsu, jefa de Desarme de la ONU, ha declarado que existe un aumento de hasta 600 por ciento de ciberdelitos, entre los que se encuentran phishing y correos con software malicioso (malware), durante la pandemia por Covid-19, lo que se resume en uno de esos crímenes cada 39 segundos.
El pasado 4 de noviembre, el Presidente se mostró confiado en que el programa El Buen Fin superará los 117 mil millones de pesos y la Secretaría de Economía anunció su extensión, del 9 al 20 de noviembre, con el argumento de evitar aglomeraciones y guardar la sana distancia por la pandemia.
De acuerdo con el Estudio de Comercio Electrónico 2019 (Asociación de Internet Mx 2019), El Buen Fin es la segunda temporada más favorable para el comercio, después de Navidad. El temor de ser víctimas de fraudes y de que le roben sus datos bancarios se encuentra entre las principales causas de desconfianza o uso de medios de pago electrónico, y ambos son factores que limitan el potencial del comercio electrónico en México.
Según el Reporte sobre la Intención de Compra (AMVO 2020), siete de cada 10 compradores online está pensando comprar algún producto o servicio durante El Buen Fin 2020 y 41 por ciento de los interesados en la campaña piensa elegir únicamente el canal online.
La Guardia Nacional, en la sexta Semana Nacional de Ciberseguridad desarrollada en octubre de 2020, señaló que de diciembre 2018 a junio 2020 lograron mitigar 3 mil 495 sitios web fraudulentos (phishing).
Sin afán de ahuyentar, todos los usuarios de medios digitales, especialmente los consumidores que aprovecharán El Buen Fin, deben conocer las principales modalidades de fraudes, cómo prevenirlos, evitar ser víctimas y perder parte de su patrimonio.
Entre los ciberdelitos más frecuentes se encuentra el fraude en línea, fraude contra el comercio electrónico, usurpación de identidad y los ataques con malware. Todos buscan hacerse de datos personales (de identidad o bancarios) de usuarios o consumidores para posteriormente utilizarlos en una compra, retiro de efectivo o para otro delito, e incluso vender esos datos al mercado negro o a la delincuencia organizada.
El fraude, incluyendo el de en línea o al comercio electrónico, consiste en acciones tendientes a engañar a otra persona o aprovechar algún error para obtener un beneficio, casi siempre económico.
El fraude en línea tiene varias modalidades o técnicas de engaño (ingeniería social) para lograr que un usuario de dispositivos móviles, de Internet, consumidor en alguna plataforma de comercio electrónico o de pagos entregue sus datos personales.
La técnica más común es el phishing a través de correos electrónicos, que buscan obtener datos para usurpar la identidad, y luego obtener algún beneficio económico. Dicha técnica de engaño también puede desarrollarse a través de mensajes de texto (Smishing), redes sociales (WhatsApp, Facebook, Instagram), sitios de internet de comercio electrónico o tiendas en línea propios de marcas o establecimientos.
El fraude se vale de sitios de internet falsos, ofertas irresistibles, similitud de imagen del comercio o la suplantación de identidad de algún contacto, o semejanza de alguna cuenta de correo confiable, o bien de documentos desconocidos o links de sitios web, a través de los cuales se obtienen directa o indirectamente los datos de usuarios y consumidores.
Para prevenir los fraudes en línea, te recomendamos:
1. Fortalecer tu sentido común. 2. Dudar de ofertas irreales. 3. Escribir directamente el sitio al que quieres ingresar y revisar el nombre exacto del sitio web. 4. Vigilar que el sitio web tenga https. 5. Evitar descargar archivos, no abrir archivos desconocidos y no dar clic en ligas que no necesites, sean sospechosas o de remitente no esperado. 6. Actualizar tu dispositivo y de preferencia instalar un antivirus. 7. De preferencia, usar plataformas o medios de pago (como tarjetas digitales) que puedan devolverte tu dinero si hay algún fraude.
En todo caso, si ves algo sospechoso, no te arriesgues. Y si fuiste víctima de un fraude en línea, reporta a tu banco y contacta al vendedor o establecimiento. Si es necesario, acude ante las autoridades: Profeco, Condusef o a la Guardia Nacional, en su área de prevención de delitos cibernéticos, al teléfono 088.
*Jurista digital y Coordinador de Ciberseguridad y Derecho Digital de la Udlap Jenkins GraduateSchool.