Keith Tippett: generoso piano explorador
Originario de Bristol y con sólida herencia musical, se mudó a Londres para adentrarse en la efervescente y variada escena de los años sesenta en la capital inglesa. Fue un gran improvisador y progresivo intérprete que gustaba de tocar en pianos preparados, así como insertarse en agrupaciones para colaborar y poner su sello entre jazzístico y experimental en sus influyentes participaciones, incluyendo algunos apuntes de art-rock, abrazados sobre todo al inicio de su trayectoria.
Keith Tippett (Avon, 1947) colaboró con King Crimson a principios de los setenta e incluso fue invitado por Robert Fripp para ser miembro permanente, pero optó para mantenerse como apoyo para seguir con su trayectoria independientes; formó Centipede, ensamble de medio centenar de músicos entre quienes se encontraban miembros de la afamada corte del Rey Carmesí y de Soft Machine, estampando su propuesta en Septober Energy (1971), de convencida vocación freejazzera. Formó parte de Ovary Lodge y compartió sonidos con Harry Miller y Louis Moholo-Moholoy, exiliados músicos sudafricanos. Con su sexteto, entre quienes estaba Elton Dean con quien seguiría formando complicidades, presentó su debut You Are Here, I Am There (1970), seguido de Dedicated to You, But You Weren’t Listening (1971), muy a tono con el jazz británico de la época. Trascendió su matrimonio al terreno creativo con su esposa vocalista Julie Driscoll, también de orientación arriesgada y quien participó en Blueprint (1972), navegando entre un jazz con tintes pop. Siguió grabando y asociándose sin parar durante toda la década, con amplio espíritu cooperativo, como se muestra en la agrupación llamada Ark, a través del intrigante Frames: Music for an Imaginary Film (1978).
A partir de los años ochenta, entre otras contribuciones, formó parte del cuarteto Mujician (nombrado así por la forma en la que su hija contestaba acerca de la profesión de su padre), junto con Paul Dunmall (vientos), Tony Levin (percusiones), homónimo del gigante del bajo, y Paul Rogers (bajo), quienes le entraron con gran desafío a la improvisación jazzera como se deja escuchar en los intrincados The Journey (1992), Poem About the Hero (1994) y Birdman (1996), grabados en vivo con toda la espontaneidad del caso; siguieron Colours Fulfilled (1998), primer álbum de estudio, seguido por Bristol Concert (2001), capturado originalmente en 1991, Spacetime (2002) y el cierre con There’s No Going Back Now (2006), revisitando el avant-garde postmilenario.
En su etapa final y ya con la experiencias puesta al servicio de las aventuras sonoras, entregó Pianoforte (2011) y Two for Joyce: Live in Trieste (2013), al lado de Giovanni Maier, para después formar un octeto junto a su esposa con el que concretó From Granite to Wind (2011) y The Nine Dances of Patrick O’Gonogon (2016), mismo año en el que apareció Mujician solo IV (Live in Piacenza) (2016), una de sus cimas interpretativas. Tras recuperarse de un ataque cardiaco, presentó Live in Triest (2018), A Mid Autumn Night’s Dream (2019), en el que se retomó una presentación del 2016 con Julie, Paolo Tofani y Capra Vaccina, y The Unlonely Raidancer (2019), donde mostró un tono más evocativo, funcionando a manera de agradecimiento.
De acuerdo con el diario The Guardian, el gran Robert Wyatt, quien colaboró con él en el grupo Symbiosis, declaró que Tippett era “un tipo occidental con gran corazón, muy distinto a la vieja guardia mafiosa del jazz de Londres en aquellos años… rompía barreras, escuchaba a todos, era de mente abierta y ponía juntos a músicos de diferentes géneros”; por su parte, David Sylvian también agradeció su gran generosidad cuando lo acompañó en sus primeros lances hacia el terreno de la improvisación a principios de los noventa. Tippett falleció el 14 de junio del 2020 a los 72 años.
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