El talismán del Madrid
Mil 152 días tuvieron que pasar, 3 años, 1 mes y 26 días para que el Real Madrid se volviera a coronar en su casa, España. No ha sido ni de lejos la más grande sequía del título nacional, pero era la mayor exigencia de su afición tras las cuatro Champions entre 2014 y 2018. Aunque desolada por la pandemia, la Cibeles se vistió de blanco ya que la 34º de la historia llegó al límite. La segunda de Zidane es quizá el título más bizarro que conseguirá. El reto eran 10 partidos en 32 días tras tres meses de pausa, una anomalía total. Sabe mejor aún cuando es el primero de relevancia desde que regresó tras la Supercopa de España y el primero desde que se fue Cristiano. Desafortunadamente, algunos necesitaban de la escasez de ciertos recursos para reconocer la talla de técnico que es; y si en esta época de éxito total hay un común dominador, ese es Zinedine Zidane, el verdadero talismán del Madrid. Para hoy ya le ha entregado 17 trofeos, 11 como técnico y seis como jugador. Ahora está a tres títulos de ser el mejor entrenador de la historia de la casa blanca. En el futbol como en la vida, a veces hay que tocar fondo para volver a encontrar la luz. Durante la crisis tras la partida del francés con Lopetegui y Solari, pocos podrían haber firmado el título un año después del comeback de ZZ, nada funcionaba. Algunas cosas hoy son seguras, Sergio Ramos se tiene que quedar hasta ya no poder más, se le ve en excelente estado físico y fue crucial la última temporada como gran capitán en cancha y vestidor. Valverde ha sido ese elemento de frescura en el campo que necesitaba el equipo, Benzema al fin está recibiendo el brillo merecido sin un Cristiano Ronaldo al cual servirle y el crecimiento de Casemiro más la solidez de la veteranía de Modric y Kroos que sigue siendo un crack, hacen que el Madrid tenga los ingredientes para conseguir algo más solo con algunos ajustes. Ni qué decir de Courtois y su transformación al ADN madridista, el gran cierre se debe también en gran parte a él. El regreso de Asensio tras su lesión ilusiona y Hazard cuando las lesiones se lo permitan, tiene la obligación de triunfar. Bale y James ya son un cero a la izquierda, a pesar del talento. El empate y victoria ante el acérrimo rival son para presumir en la campaña y sin duda es un año para celebrar, el contexto lo amerita.