Siempre será en caliente
España ha vuelto a estremecerse ante un crimen infame, el asesinato del pequeño Gabriel Cruz, de ocho años, cuya desaparición había mantenido en vilo a amplios sectores de la sociedad, íntimamente solidarizados con el sufrimiento de una familia que, hasta el último momento, mantuvo la esperanza de hallarle con vida. No fue así y, dentro de la absoluta desgracia, sólo cabe felicitar a la Guardia Civil por la rápida resolución del caso, que ha permitido desenmascarar a la presunta asesina y, sobre todo... Читать дальше...