Novilladas

El mundo de los toros, además de formar parte de nuestras señas de identidad, genera más de 50.000 puestos de empleo en Andalucía. Consciente de su importancia, el Secretario General de Interior y de Espectáculos Públicos de la Junta de Andalucía, Miguel Briones, se ha reunido con los distintos representantes taurinos, sabiendo que hace falta una ley de defensa de la tauromaquia, que actualice y proteja la fiesta de los toros. En los últimos Presupuestos Generales del Estado, quedó demostrado que la tauromaquia es la actividad menos subvencionada que mayores recursos aporta a las arcas públicas, recibiendo únicamente 65.000 euros (frente a los millones que reciben la música, el cine o el teatro). Este nuevo plan debe nacer desde la base. Andalucía cuenta, en la actualidad, con 26 escuelas taurinas.

Si bien es cierto que se mantienen los festejos sin picadores, el problema radica en las novilladas con caballos. Su coste se acerca, en muchos casos, a los de una corrida de toros. Y a los empresarios, por gastos a asumir y frente al tirón de toreros y figuras, no les resulta rentable ofrecer este tipo de festejos.

El pasado año, no llegaron a 15 las novilladas picadas que se celebraron en la región andaluza. Por eso, lo que en apariencia sería normal, se convierte hoy día en algo extraordinario. La localidad sevillana de Guillena va a conmemorar los 25 años del debut con caballos de Morante de la Puebla con una novillada con picadores. Será el sábado 27 de abril. Una iniciativa admirable, donde actuarán José Ruiz Muñoz, Fernando Navarro y Daniel de la Fuente, con seis novillos de distintas ganaderías.

Un festejo que los aficionados estamos llamados a apoyar. Pues en estas novilladas está el futuro y el porvenir de la fiesta.