La prórroga del Presupuesto lleva al tiempo de descuento las medidas más urgentes de PP y Cs
La prórroga del Presupuesto de la pasada legislatura coloca en el tiempo de descuento muchas de las medidas concretadas por el Gobierno de PP y Cs en un plazo de 100 días. Algunas de estas iniciativas son de calado para la microeconomía, que es la que se nota en la calle y sustenta los datos macro, como la ampliación a 24 meses de la tarifa plana de autónomos y la superreducción» para los jóvenes (30 euros). Otras apuntan directamente al funcionamiento del estado de bienestar, como el refuerzo educativo, con más profesorado y medidas para el alumnado con necesidades. El PP andaluz defendió que un Presupuesto de la Junta «no se puede tener de un día para otro porque se trata de una ley que lleva miles de datos» y echó la culpa al anterior Gobierno liderado por la socialista Susana Díaz de no haber «presentado y aprobado» unas cuentas públicas para 2019 «por haber estado jugando a intereses personales». El PSOE exige al presidente Moreno que «cuanto antes» envíe el Presupuesto al Parlamento, atribuyendo la demora a la estrategia que, según los socialistas, ya empleó Rajoy –el modelo de gestión reconocido por el presidente en la investidura y la toma de posesión–, cuando «retrasó» los Presupuestos Generales del Estado (PGE) hasta después de las elecciones andaluzas del año 2012. El Gobierno popular, como preveía Moreno, no va a tener «100 días de gracia». La oposición ejerce desde la investidura –alentando las protestas– y de las críticas «preventivas» se ha pasado a la vía de los hechos cuando el Gobierno aún no ha nombrado a la mayoría de sus cargos. El propio Moreno señaló que las cuentas no estarán antes de junio.
El vicesecretario de Sectores Productivos del PP-A, Pablo Venzal, destacó que su partido pidió al anterior Ejecutivo que «hiciera los deberes», presentara un proyecto de Ley de Presupuestos en la Cámara andaluza, «y ya luego tirara los dados al aire». Tras destacar que el Presupuesto hay que hacerlo «de manera seria y con carácter realista, algo que no se hace en 15 días». Venzal, que indicó que la aprobación de las cuentas públicas conlleva muchos trámites, insistió en que se trata de un «documento complejo» y que requiere de unos plazos «prudenciales» para su elaboración, aunque posteriormente «se intente mejorar en sede parlamentaria» con el diálogo entre las fuerzas parlamentarias y los agentes sociales. El dirigente del PP-A se mostró convencido de que su partido asumirá el compromiso que adquirió de provincializar las próximas cuentas aunque desconoce si será «al cien por cien». «Sí se darán los pasos con Cs para la transparencia y para que las partidas genéricas vayan desapareciendo», apuntó. Preguntado sobre si el texto alternativo que el PP-A presentó a los Presupuestos de 2018 podría servir de base, Venzal indicó que el documento presentado era «de oposición» y que ahora habrá que consensuarlo con Cs. No obstante, dijo no tener duda de que muchas de las enmiendas que los populares presentaron sí estarán incluidas, «aunque habrá otras que no porque Cs no esté de acuerdo». Entre algunas de las cuestiones que sí se incluirán, se mostró convencido de que estarán medidas en materia tributaria. Junto a ello, el vicesecretario del PP-A consideró necesario que el Gobierno de Pedro Sánchez «reformule» su proyecto de Presupuestos Generales del Estado (PGE) para hacerlo «creíble» y para que las comunidades obtengan los ingresos previstos.
Por su parte, el PSOE-A pidió al presidente de la Junta que envíe «cuanto antes» al Parlamento el proyecto de Ley de Presupuestos de la comunidad para este año, porque no hay motivo para retrasarlo hasta el mes de junio. El delegado de Universidades del PSOE-A, Antonio Ramírez de Arellano, criticó que Moreno haya afirmado que no se plantean enviar al Parlamento el proyecto de Ley de Presupuestos hasta el mes de junio, una vez que pasen las elecciones municipales y europeas del 26 de mayo. En su opinión, Para Ramírez de Arellano, el nuevo Gobierno andaluz está generando un escenario de «oscurantismo» y de «falta de transparencia» en relación con los Presupuestos para este año, que son la «pieza clave para conocer las políticas que se plantea» hacer el nuevo Ejecutivo, formado por dos partidos, PP-A y Cs, pero que necesita de manera permanente de la «ultraderecha» de Vox. «Eso se tiene que escribir negro sobre blanco y es en los presupuestos donde lo vamos a saber», indicó Arellano, en relación con el apoyo que el nuevo Gobierno necesita de la formación de Abascal. Arellano señaló que, desde su experiencia como ex consejero de Hacienda, el proyecto de Ley de Presupuestos podría estar en el Parlamento a finales de febrero o principios de marzo, por lo que no entiende el retraso hasta junio.