La novela de la de-generación
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Los hijos de los 70 viven en el agravio. Son la generación de las promesas rotas, la primera en la historia que ha pasado a vivir peor que sus padres. Y eso no estaba previsto. Por ello son los de-generados, los invertidos, los desclasados, los que han visto cómo la diferencia entre realidad y deseo se ampliaba tanto qu ellos quedaban en una especie de vacío vital, siempre insatisfechos, siempre refunfuñantes, siempre impacientes. «Los jóvenes de hoy día han vivido en la confirmación del caos, con lo que su situación no les ha venido por sorpresa y han podido responder en consecuencia. A mi generación les prometieron tantas cosas falsas que convive con un desencanto radical del que uno no se escapa», asegura el escritor Juan Vico.
El autor de «Los bosques imantados» acaba de publicar «El animal más triste» (Seix Barral) novela donde pone el dedo en la llaga sobre ese vértigo que existe cuando miras atrás y sólo te ves a ti mismo joven y guapo burlándose de todos tus fracasos. «Podríamos decir que es una novela sobre el deseo y sus fracasos. El mismo concepto de deseo implica frustración, tanto porque no consigues lo que querías, como si lo consigues y pasas a desear otra cosa. Siempre genera insatisfacción, algo muy presente en mi generación», asegura.
La novela nos presenta a una serie de amigos que se reúnen un fin de semana en una casa del Pirineo. Allí volverán a entrecruzar sus vidas hasta confundir quienes eran entonces, con 20 años, y quienes son ahora, con 40. La distancia de la imagen ingenua que tenían entonces de sí mismo con el peso y deformación que sienten que reflejan ahora harán que vuelquen toda su frustración en calmar el vértigo con el sexo y los desahogos rápidos. «El sexo funciona como el nexo de unión de todas estas vidas, pero sólo es una excusa. Está claro que no es una visión optimista de las relaciones amorosas en los tiempos actuales. Es un tema universal imposible de resolver y en el que me interesa mucho indagar», confiesa Vico.