Nuevo desplante a los agentes de movilidad
El pasado sábado, bajo la atenta mirada de los más pequeños, diferentes colectivos recorrieron el paseo de la Castellana para llenar de ilusión a los niños que esperaban la llegada de los Reyes Magos. Entre los que pertenecían al Ayuntamiento de Madrid figuraron bomberos, sanitarios del Samur y, como cada año, agentes de movilidad. Sin embargo, éstos últimos no se sintieron igual de cómodos durante el recorrido que en años anteriores.
De acuerdo con una carta a la que ha tenido acceso LA RAZÓN, y que el sindicato CSIT ha remitido a la alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena, a la delegada de movilidad, Inés Sabanés, al delegado de Seguridad y Emergencias, Javier Barbero, y al director general de gestión y vigilancia de la circulación, Francisco López Carmona, durante el desfile se produjeron «sucesos lamentables». En la misiva insisten en que «en los últimos años, los agentes de movilidad han tenido una destacable representación en el evento, especialmente los que circulan en bicicleta (ciclos) y motoristas, que han desfilado en anteriores ocasiones sin problema ninguno». Sin embargo, de acuerdo con este sindicato, en esta ocasión no ha sido así. «Desconociendo los motivos, este año, los agentes de movilidad fueron expulsados del lugar que les correspondía en el desfile (detrás de la carroza del Ayuntamiento) y se les envió varias decenas de metros hacia adelante, justo detrás de la Policía Nacional». De este modo, como denuncian, terminaron «a varios centenares de metros de la cabeza del desfile».
Insisten en que «la cuestión no radica sólo en el desplante de mover a los agentes que desfilaban (cosa que no entendemos y que permitió el adjunto al departamento de movilidad), lo realmente indignante es la forma con la que se realizó este acto, ninguneando públicamente un Cuerpo que ya de por sí sufre de precariedad laboral», subrayan.
Los agentes que participaron en la Cabalgata insisten en que, en algunos momentos del recorrido, «se les hizo un sándwich entre la Policía Municipal y la Nacional». Insisten en que «el comisario de Policía Municipal ordenó que una furgoneta rotulada se colocase justo detrás de los agentes de movilidad para ir empujando y apremiando su paso». Y aseveran que, esta actitud, hizo «peligrar en múltiples ocasiones la seguridad e integridad de los agentes ciclo». Por todo lo descrito, «instamos a que solicite las grabaciones de los canales de la emisora de Policía Municipal que tenían asignados para el evento en la franja horaria entre las 19:20 y las 19:35 horas, en las que se pueden escuchar comentarios vejatorios, insultantes y agresivos, especialmente contra las agentes ciclo femeninas», según los agentes que lo presenciaron.
En la carta que han enviado a la alcaldesa solicitan que «se actúe de forma disciplinaria e incluso penalmente si el acto descrito pudiera estar en el Código Penal». Y añaden que «al juicio se pueden aportar dichas grabaciones contra los interlocutores que participan en las mismas» porque consideran que «con actuaciones de este tipo queda dañada la imagen de un Cuerpo de Policía que en ningún momento está representado por personas como las que han provocado esta lamentable situación».