El Mnac se moderniza
Hace algún tiempo que el actual equipo del Museu Nacional d'Art de Catalunya (Mnac) tuvo la buena idea de prescindir de límites cronológicos a la hora de presentar el arte catalán. Aquella obsoleta idea de concluir el discurso del Mnac en la Guerra Civil ahora no tiene sentido. Buena prueba de ello es la exposición que ahora puede verse en el Palau Nacional de la montaña de Montjuïc.
Bajo el título «Liberxina. Pop y nuevos comportamientos artísticos, 1966-1971» centra su atención en la renovación cultural que se llevó hace medio siglo, en 1968 y que convirtió el arte en una herramienta con la que muchos creadores pudieron mostrar su mirada más crítica.
Para ello, la muestra, comisariada por Àlex Mitrani e Inma Prieto, se apoya entrabajos de autores como Eduard Arranz-Bravo, Equipo Crónica, Francesc Artigau, Rafael Bartolozzi, colita, Gonzalo Herralde, Antoni Miralda, Xavier Miserachs, Antoni Llena, Pau Riba o Carles Santos, entre muchos otros.
Todo ello partiendo de una película de Carles Duran titulada «Liberxina 90» y que tenía como argumento el de un «gas que incitaba a la revolución». A partir de aquí, se nos invita a adentrarnos por el arte catalán entre 1966 y 1971, la recta final de la dictadura, un tiempo en el que no había límites para experimentar artísticamente. Este hecho es visible en muchas de las piezas presentes en la exposición en el Mnac surgidas en el momento en el que los estudiantes se levantan en las calles de París en mayo de 1968, los Estados Unidos siguen enviando tropas a Vietnam mientras son asesinados Martin Luther King jr. y Robert Kennedy en Memphis y Los Ángeles, respectivamente; o Praga vive su muy particular primavera.
Además de nombres consagrados y presentes en exposiciones permanentes de museos, la muestra quiere también rescatar a artistas olvidados o descontextualizados como Jordi Galí, a quien el crítico Alexandre Cirici consideró como el más innovador y cosmopolita de los años sesenta, así como a las artistas Silvia Gubern, Mari Chordà, Aurèlia Muñoz o Amèlia Riera, autora de una inquietante escultura con forma de silla, del año 1971, que recibe al visitante en la primera de las salas de la muestra.
A la vez, se exhibe un vídeo inédito de Antoni Muntadas, así como la primera obra de videoarte en España, «Primera muerte», realizada en el año 1969 por el colectivo conocido como Grupo del Maduixer, impregnado de un espíritu «Beatnik» y formado por Àngel Jové, Jordi Galí, Silvia Gubern y Antoni Llena.
El Arte Pop, que en aquellos añops conoce una especial proyección internacional de la mano de Andy Warhol y Roy Lichtenstein, En nuestro país son los valencianos Equipo Crónica quienes hacen del Pop su personal marca para mirar con ojos irónicos y críticos la agonizante dictadura de Franco. En el Mnac puede verse una de las obras más extraordinarias e icónicas de Equipo Crónica: «Pim-pam-pop».