El centro Galileo vuela a Madrid
La unidad de apoyo del Centro de Vigilancia de Seguridad Galileo de la Unión Europea ya vuela a Madrid. Este organismo, cuya sede se encuentra ahora mismo en Swanwick (Reino Unido), es otra de las instituciones que abandonará este país una vez consumado el Brexit.
Galileo se encarga de vigilar y responder a las amenazas de seguridad, protege la información sensible dentro de la infraestructura del sistema de satélites de la Unión Europea y también sirve como interfaz para que los gobiernos puedan facilitar la encriptación de los datos. El centro principal se encuentra en la localidad francesa de Germain-en Laye en Francia, pero también cuenta con una unidad de apoyo en caso de problemas técnicos en la antes citada localidad británica cuyo desarrollo quedó paralizado tras el referéndum de salida de Reino Unido del bloque comunitario. La decisión se tomó ayer por el denominado proceso de «comitología», una votación llevada a cabo por un comité de expertos en el que cada país cuenta con un representante. Entre ocho aspirantes, la candidatura de Madrid se impuso por una «amplía mayoría», según aseguró ayer la Comisión Europea. La entidad aterrizará en España el próximo marzo aunque no trabajará a pleno rendimiento hasta el mismo mes de 2019, cuando se produzca el divorcio británico.
80 empleos fijos
Según confirmó ayer la portavoz del Ejecutivo comunitario, Lucia Caudet, la actual oficina no está operativa y sólo cuenta con un empleado, pero está previsto que en los próximos años pueda disponer de una plantilla máxima de 80 empleos fijos, según las estimaciones que el Comisión Europea presentó a los países interesados en presentar su cadidatura. Su implantación, además, acarreará la creación de 100 puestos de trabajo directos, aseguraron fuentes de la Comunidad de Madrid. La planta tendrá que trabajar en tres turnos, 24 horas al día y siete días a la semana.
Para la delegación española, la mudanza a Madrid supone una apuesta por las nuevas tecnologías que puede actuar como «locomotora» y una señal positiva tanto para esta región como para el conjunto de España. Estas mismas fuentes señalan la importancia no sólo del número de puestos creados sino su «perfil cualitativo». La localidad de Torrejón de Ardoz ya cuenta con el Centro de Servicios del sistema de navegación por satélite europeo Galileo (GSC) que podría contribuir a crear sinergias con el nuevo organismo. El nuevo centro de apoyo se ubicará en San Martín de la Vega, donde se encuentra a su vez el Instituto Tecnológico de la Marañosa, que está integrado a su vez en el Instituto Nacional de Técnica Aeroespacial (INTA).
El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, se mostró ayer «satisfecho» con la elección de Madrid y explicó que esta decisión sitúa a España como «polo tecnológico vinculado al sector aeroespacial». La jefa del Ejecutivo madrileño, Cristina Cifuentes, se felicitó, entre otras cuestiones, por el «efecto sede que atraerá a otras empresas» del sector del I+D+i a nuestro país.
El Gobierno está trabajando en nuevas candidaturas para que España acoja centros de excelencia tecnológica, una tarea que desarrollan tanto la comisión interministerial para el Brexit como otros ministerios de forma independiente, anunció el secretario de Estado de Asuntos Europeos, Jorge Toledo.
España sufrió el pasado mes de noviembre un importante revés al perder la candidatura de Barcelona la opción de albergar la Agencia Europea del Medicamente (EMA por sus siglas en inglés), una de las dos agencias que abandonará Reino Unido tras su salida del bloque comunitario. La victoria de Ámsterdam sobre la Ciudad Condal supuso una pérdida de hasta 5.000 puestos de trabajo adicionales y 35.000 visitas al año. París consiguió alzarse como vencedora para convertirse en la sede de la Autoridad Bancaria Europea (EBA por sus siglas en inglés). España no entró en liza en esta ocasión ya que prefirió centrar sus esfuerzos en la candidatura de Barcelona.