Un descarrilamiento «no previsible» por una inundación que no se podía detectar
¿Llegó con retraso la alerta por fuertes lluvias en la zona? ¿Realmente se anunció a los pasajeros un transbordo en autobús poco antes del accidente que no se produciría? Las horas posteriores al descarrilamiento del tren en Arahal, que no acabó en tragedia de milagro, obligaron al ministro de Fomento a ofrecer la versión oficial del Gobierno. Conclusión: fue algo «no previsible» porque «acababa de pasar otro tren y no había absolutamente nada».
Íñigo de la Serna explicó que el tren que circuló a primera hora se encontró con una inundación «en otro punto, seis kilómetros más adelante» y «había pasado por el lugar en el que se produjo el descarrilamiento sin que hubiera nada». Por tanto, «estábamos ante una circunstancia imprevista, más el añadido de que el mismo tren que va a recoger a las personas para llevarlas a El Sorbito pasa por una zona y se encuentra después, al regresar, esa zona inundada de forma imprevista», añadió. Otra prueba de que era imposible detectar «la existencia de inundación».
Adif aseguró ayer que es la primera vez en 20 años que la vía queda anegada en ese punto y recordó que dicho tramo fue construido por la Junta de Andalucía. Precisamente, el delegado del Gobierno, Antonio Sanz, consideró una «mezquindad política» la reacción de la Junta y el PSOE-A al intentar «culpar» al Gobierno del accidente.
Anuncio de transbordo
Frente a esta versión, un vecino de Vélez-Málaga, José Franquelo, herido en el accidente explicó ayer a Efe que a la altura de Marchena informaron a los viajeros de que en la zona de Arahal se haría un transbordo en autobús, «debido a que la vía estaba inundada». «Sin embargo, poco después llegó el revisor y nos dijo que se podía pasar, y a los pocos minutos de aquello, por poco nos matamos todos, y es lo que no entiendo», relató este empresario, que señaló que tuvieron «mucha suerte» porque podía haber acabado en una «catástrofe».
Técnicos de Adif continúan con los trabajos de reparación del tramo afectado, por lo que Renfe mantiene activo el plan alternativo de transporte, con transbordos por carretera en algunos trayectos. Las labores se centran en facilitar el acceso del tren taller.
Los dos heridos ingresados siguen graves
El hombre de 51 años vecino de Marchena que resultó con las heridas más graves fue operado ayer de múltiples fracturas, mientras que la otra herida grave, una mujer de unos 50, pasó a planta tras ser operada el miércoles.
El primero tiene roturas en una cadera, una vértebra, en el hombro y en la nariz, tras golpearse tanto con el lateral del vagón siniestrado como con el techo. Por la violencia de los golpes que sufrió tuvo que ser sedado para ser evacuado y despertó en el Virgen del Rocío. La mujer sufrió lesiones sobre todo en las piernas. Otras 35 personas resultaron heridas leves.