La investigación de Imelsa está casi colapsada por la falta de medios

La instrucción de la causa Imelsa avanza a paso lento, muy lento, porque los refuerzos prometidos para el Juzgado de Instrucción número 18 o no llegan, o no lo hacen del modo adecuado.

La promesa de que las macrocausas tendrían dedicación exclusiva se ha cumplido en la mayoría de los casos, pero no así en todos, y la instrucción de Taula (también llamada Imelsa) está siendo ejemplo de ello.

El juez de refuerzo que se asignó a Instrucción 18 obtuvo plaza a los pocos meses de llegar y el esforzado juez Víctor Gómez volvió a quedar solo con la instrucción de la macrocausa y con todos los asuntos que entran en su juzgado.

Pronto se le volvió a prometer ayuda y esta ha llegado, pero tarde y mal.

Un juez de refuerzo auxilia a Gómez un día a la semana. Ayer mismo, el juez titular estaba de guardia de incidencias, posterior a la guardia normal, lo que imposibilita cualquier tipo de avance en la investigación de la operación Taula.

Así, ahora mismo, la mayoría de las piezas en las que se ha dividido la operación están «congeladas» y tan solo se instruye la que hace referencia a los pagos de las empresas a la entidad Laterne y el desvío de fondos de la campaña electoral del PP de 2007.

Pero ni siquiera en esta pieza se avanza con premura.

Así, tras la declaración de la imputado Alfonso Grau y Eduardo Santón, su señoría aun no ha decidido si le impone la fianza al segundo, solicita por el Ministerio Público en la cantidad de 300.000 euros.

Tampoco ha decidido si solicita el apoyo de la Oficina de Recuperación y Gestión de Activos, dependiente del Ministerio de Justicia para que evalúe los activos, tanto financieros como inmuebles que puedan pertenecer a Alfonso Grau, ya que hoy por hoy, los investigadores desconocen las propiedades y los activos del imputado al que se la ha impuesto una fianza de un millón de euros que no ha pagado. Se espera que en próximas fechas aporte la lista de propiedades que pretende poner como aval de la fianza.

Ahora mismo, más de cincuenta imputados ven como su investigación no avanza y su situación no cambia, ni para bien ni para mal.