Seguridad primó en el voto de los ecuatorianos

QUITO, abril 22.— El presidente Daniel Noboa celebró los resultados del referendo y consulta popular del domingo, donde nueve de las 11 preguntas sometidas a consideración del electorado fueron aprobadas, entre ellas, las relacionadas con extender el poder de las Fuerzas Armadas para luchar contra las bandas y la violencia.

«Ahora tendremos más herramientas para luchar contra la delincuencia y devolverle la paz a las familias ecuatorianas», consideró el mandatario en un mensaje publicado su cuenta en la red social Instagram.

Cuando todavía faltaba por contabilizarse alrededor del 30 por ciento de los votos, los cómputos arrojaban el sí mayoritario, además, a la posibilidad de extradición y la reducción de los hábeas corpus de modo que las penas sean cumplidas totalmente en prisión, así como a la elevación de las sentencias de prisión en los delitos tipificados como terrorismo y corrupción, y la creación de una judicatura especial en materia constitucional.

Además, se ha otorgado anuencia para que los militares puedan intervenir en las cárceles, en respaldo a la labor policial. Sin embargo, las preguntas relacionadas con la reforma a la Constitución para que el trabajo pudiera contratarse por horas, y con la resolución de litigios comerciales y de inversión mediante arbitraje internacional, fueron rechazadas.

Aunque el ejecutivo se manifestó con aires de júbilo, activistas sociales estimaron que en los resultados de la consulta primó el temor por la creciente inseguridad, y aseguraron que el principal propósito del Gobierno estaba en esos dos últimos aspectos.

En tal sentido se pronunció el analista político Mauro Andino, quien consideró que Noboa fue «el gran derrotado de la jornada» pues, dijo, «las joyas de la Corona» eran el contrato por horas y los tribunales de arbitraje internacional.

La titular del movimiento Revolución Ciudadana (RC) y excandidata presidencial, Luisa González, afirmó que impedir esa modalidad laboral y los arbitrajes externos detienen al ejecutivo en sus intenciones.

En un comunicado, el Frente Unitario de Trabajadores (FUT) señaló que «el pueblo ecuatoriano se pronunció en contra de mecanismos» que comprometen su «independencia y favorecerían a las empresas multinacionales», y puntualizó que al rechazar el empleo por horas se había defendido el derecho de los trabajadores por la generación de trabajo «con condiciones laborales justas».

Desde México, el diario La Jornada comentó en un editorial que se había dado un golpe al interés de profundizar el modelo neoliberal, por lo que el tablazo político habría sido para el gobierno.

Por su parte, el presidente de la Confederación de Nacionalidades Indígenas de Ecuador (Conaie), Leónidas Iza, estimó que la gente votó por miedo, no por apoyo a la gestión del mandatario, reportó PL citando sus declaraciones a la radio. El economista Alberto Acosta apostilló que la inseguridad no será resuelta con más represión y lo que llamó populismo penal.

De cualquier forma, ha recibido visto bueno la política de mano dura propuesta por Noboa, que ha hecho que se le compare con la gestión del presidente Nayib Bukele frente a la violencia en El Salvador. Será difícil denunciar los excesos que se puedan presentar por parte de los uniformados.

Acudió a ejercer el sufragio el 72 por ciento del padrón electoral, una asistencia que valida los resultados. Según trascendió, la noche del propio domingo Noboa pasó al Ministerio del Interior a su ministra de Gobierno, Mónica Palencia, una titular fuertemente vinculada, por su cargo, al asalto reciente de la policía ecuatoriana a la Embajada de México. Fuentes de la Presidencia indicaron que en el transcurso de la semana habría otros movimientos, posiblemente en las áreas de Trabajo y de Comunicación.