Fallece Brigitte Bardot, actriz e ícono del cine francés, a los 91 años
La actriz y activista por los derechos de los animales Brigitte Bardot (París, 91 años) falleció el domingo 28 de diciembre según informó su fundación en un comunicado.
Desde hace semanas se recuperaba de una operación, la segunda en pocos meses. En aquella ocasión, tras 11 años de silencio mediático, tuvo la deferencia de salir a desmentir su propia muerte cuando se difundieron los rumores.
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Brigitte Bardot, símbolo del cine francés y la liberación sexual
La actriz alcanzó fama internacional en 1956 con la película 'Y Dios creó a la mujer', cinta que provocó escándalo y la catapultó al estrellato global. La obra convirtió a Bardot en un referente de la liberación sexual, ganándose el apodo de 'BB'.
Comenzó su trayectoria como modelo adolescente y alcanzó la portada de Elle a los 15 años. Su transición al cine fue inmediata, protagonizando éxitos europeos como 'Naughty Girl', 'Plucking the Daisy', 'Babette Goes to War' y 'La Parisienne'. Luego llegó a Hollywood con 'Dear Brigitte' junto a James Stewart y compartió set con Sean Connery en 'Shalako'.
Carrera musical y activismo animal de Brigitte Bardot
Tras abandonar la actuación en 1973, Bardot desarrolló una extensa carrera musical que complementó su popularidad. Posteriormente, dedicó su vida al activismo en favor de los derechos de los animales, denunciando la caza de focas en Canadá durante los años 1970, con imágenes que aún permanecen en la memoria colectiva.
Su fundación anunció su fallecimiento el domingo 28 de diciembre. Desde semanas anteriores se recuperaba de una operación, segunda intervención en pocos meses, aunque no se ha revelado la causa de muerte. En octubre sufrió otra cirugía debido a una enfermedad grave.
Vida personal y polémicas públicas de Brigitte Bardot
A pesar del éxito, la estrella enfrentó problemas de salud mental, incluyendo varios intentos de suicidio durante la década de 1960. También generó controversia por sus posturas políticas cercanas a Jean-Marie Le Pen y su hija Marine Le Pen, y sus opiniones provocaron debates con el movimiento feminista sobre relaciones entre hombres y mujeres.
En sus últimos años, Bardot se mantuvo recluida en sus propiedades de Saint-Tropez, con serias dificultades para desplazarse y lejos del ámbito mediático. El presidente francés, Emmanuel Macron, destacó que la intérprete encarnaba “una vida de libertad” y aportó “un brillo universal a Francia”.