Le urge ser campeón
La pregunta es obligada. ¿A quién le urge ser campeón? Con supuestos lógicos, acompañados de datos concretos, la respuesta es : Cruz Azul.
La cercanía de la final de diciembre pasado, más el enorme peso de su historia, conducen a tener que señalar a los cementeros como los urgidos. Ellos mismos ya lo volvieron a pregonar lo cual indica que su conciencia funciona.
Lo hicieron con intención de avivar la llama, no con la certeza de que su anhelo no fue obtenido. Ser campeón, es vital para Cruz Azul; aunque no sea líder de la competencia.
Pumas, Monterrey y Toluca también se apuntan en esta lista. En menor grado que los cementeros pero de igual manera levantan la mano. Conseguir el supremo trofeo, en las condiciones de urgencia, no es tema de apreciación, es asunto vital porque estos tres ya olvidaron qué se siente al ser campeón.
Otros clubes, como Morelia, Tijuana y Necaxa no se afanan tanto por ser el conquistador del premio mayor.
La presión se concentra en pocos.
Tigres, Chivas y Santos, relativamente acaban de ser campeones; todavía tienen el grato sabor de dichas mieles. Por eso no se acongojan. Desearán repetir pero no se presionan como otro.
Usted ya sabe quién. Habría la duda si León mide su calidad en base a tener que ser campeón. Pachuca es otro ganador que acostumbra pasarla bien. América, pues no se afana.
Los que participan sin la presión urgente son: Atlas, Puebla, Querétaro, Lobos y Veracruz. Por lo tanto, el torneo corto número 46 que hoy inicia, empieza con la soga en el cuello del Cruz Azul.
Y no es gratuita ni vana esta distinción. Se la tienen ganada. Favor de no proclamarlo campeón durante la compleja competencia porque de eso estamos hartos. Que levante la copa el día de la final; y punto.
Si es que puede.