El alumnado sordo de Málaga, «desamparado» por la situación de los intérpretes
La Junta de Andalucía ha reducido este curso escolar en un 30% las horas a cubrir por los intérpretes de lengua de signos en los colegios públicos de Málaga, dejando plazas sin cubrir. Tanto el colectivo de profesionales, según la sección sindical, como el alumando sordo se encuentra en una «situación de desamparo», dada la «precariedad laboral» que las empresas concesionarias del servicio ofrecen.
Pese a los intentos por ser recibidos por la delegación provincial de Educación, los intérpretes no han sido siquiera recibidos por responsables de la Administración. Ante esta situación, los profesionales han optado por iniciar una campaña de comunicación y difusión con la que visibilizar la problemática actual que afecta a un «colectivo minoritario desatendido por la Junta de Andalucía, que debería defender una educación inclusiva y de igualdad».
«Como resultado de esta situación, el alumnado sordo que no tiene intérprete de lengua de signos en el aula sufre una serie de consecuencias que no podemos permitir y que denunciamos», señalan en su comunicado. Entre ellas, «pérdida de acceso a la información, mayor nivel de estrés y ansiedad, preocupación y vulnerabilidad, mayor desconfianza ante los oyentes y desmotivación hacia los estudios, falta de inclusión y de participación en clase y en el centro, aislamiento, baja autoestima, alta probabilidad de bajas calificaciones y suspensos, y mayor posibilidad de abandono de los estudios lo que le limitará el día de mañana a la hora de acceder al empleo».
Los intérpretes critican el procedimiento laboral seguido. «La asignación de centros se comunica apenas un día antes del comienzo del curso, haciéndose imposible la correcta preparación del servicio», a lo que añaden «contratos a tiempo parcial de pocas horas» con salarios mínimos que no dan para «cubrir sus necesidades más básicas».