El mecenas alemán que adoptó a España como patria
El empresario Hans Rudolf Gernstenmaier busca un destino para su colección de 115 obras, tras donar 11 pinturas al Prado
De pequeño soñaba con ganarse la vida como jardinero. Pero su afán de aventura y de independencia, más allá del cerrado círculo de su Hamburgo natal animaron a Hans Rudolf Gernstenmaier (84 años, Rodolfo para sus amigos) a emprender en 1962 un viaje a España que cambió su vida para siempre. Llegó a Calella (Barcelona) con 1.000 pesetas en el bolsillo y a los dos meses viajó a Madrid, la ciudad en la que nada más llegar sintió que sería su casa, en la que instaló su domicilio definitivo y en la que asegura que terminará sus días.