Abandonan el mercado Allende
Antes la gente acostumbraba salir con su bolsa del mandado, ir por fruta, carne, tortillas, lo indispensable para preparar la comida, y lo más tradicional era acudir al Centro Comercial Allende en el Barrio Arriba, aquí en León, pero hoy en día poco a poco la gente ha dejado de ir, aseguran locatarios que la inseguridad y falta de rutas de transporte les ha pegado en un 60% en sus ventas.
Don Rubén creció aquí, le aprendió al negocio y con el tiempo puso el propio, sin embargo añora ver los pasillos llenos de clientes.
“Entre semana pues estamos muertos aquí, solo el día domingo nomás porque aquí viene la gente a misa y ya viene aquí al chocomil y ya, pero si no ya se hubiera cerrado desde cuando aquí el centro comercial. Nos hace falta más apoyo del gobierno que nos manden aquí rutas, que nos metan aquí dos, tres rutas para que la gente baje”, aseguró don Rubén.
Este mercado cuenta con 102 locales, de ellos sólo 48 permanecen abiertos, pues la ausencia de clientes los ha obligado a tener que sacar sus negocios a los pasillos, estrategia para hacerse visibles entre la poca gente que llegue a pasar.
Aunque por otro lado, los amantes de lo ajeno por lo general van detrás de las mujeres por lo que han dejado de asistir a surtir su mandado por temor a ser asaltadas.
“Aquí simplemente hace un mes y era en el día, golpearon a una clienta aquí por la Cuauhtémoc, la golpearon, y aquí a unas de la Aquiles Serdán ya van dos veces que las asaltan, la última vez las golpearon bien feo a las pobres señoritas”, añadió don Rubén.
La señora Angélica, también es locataria, comenta que los únicos días que tienen ventas importantes son los martes y domingo, pero al mismo tiempo anhela ya la llegada de diciembre pues es esta temporada las ganancias se componen por aquello de las posadas y comidas de fin de año.
“Hasta que llegue diciembre se vende, como ahora sí tenemos venta para qué decimos que no, sí se vende, no, como antes, pues ya no es igual, pues ya sabes que la gente de más antes compraba, venía al mandado”, recuerda.
Son relativamente pocos los locatarios que están a punto de cumplir medio siglo dedicando su vida en este negocio, quienes se resisten a abandonar y cambiar de giro, a pesar de vivir al día, dicen ahí estarán para ofrecer sus productos a la ciudadanía como antes, como en los viejos tiempos.