Genes que evitan el cáncer
Nuestra lógica podría decir que si un ser es más grande, la cantidad de células que posee es mayor, lo que haría mayor la probabilidad de algunas células se conviertan en cancerosas, por suerte para los elefantes esto no se cumple, la conocemos como “paradoja de Peto” que aparece retando a la lógica.
En 1975 el epidemiólogo británico Richard Peto investigó la causa de muerte de diferentes especies, para su sorpresa descubrió que la frecuencia de cáncer disminuía mientras más grande era el animal, en otras palabras, a mayor número de células menor riesgo de tener cáncer.