Descubre uno de los destinos más desconocidos del planeta
Entre playas de ensueño, kilómetros de selva virgen, enormes cataratas y aguas cristalinas nace un archipiélago del Atlántico que se convertirá en el próximo destino de tus vacaciones. ¿Quieres saber por qué? ¡Estas son solo 5 de las muchas razones por las que hacer un viaje a Santo Tomé y Príncipe!:
1. Conocer uno de los países menos visitados del planeta
¿Sabrías ubicar Santo Tomé y Príncipe en el mapa? Pocos pueden. En medio del Golfo de Guinea, aparece este archipiélago de selva y roca volcánica que presume de ser una de las perlas de África y uno de los destinos menos turísticos del mundo. Viajar a este rincón del mundo es sentirse el único turista entre playas increíbles y es convertirse en todo un explorador para conquistar tierras vírgenes como el Parque Nacional de Obo. Además, visitar Santo Tomé y Príncipe es conocer el verdadero ecoturismo sostenible, donde los hoteles son antiguas casas coloniales y no cambian un ápice el paisaje selvático.
2. Pisar el centro del mundo
¡Pues sí, este pequeño país es el verdadero ombligo del mundo! La más pequeña de sus islas habitadas, el Islote de Rolas, luce orgullosa su monumento del paso del Ecuador; y, además, el meridiano Greenwich pasa tan cerca de sus orillas que ha sido declarada como lo más parecido al centro del planeta. Y no solo eso, en este cachito de paraíso también se encuentran unas de las mejores playas de África que te invitan a dormir sobre sus aguas en cabañas construidas frente al mar. Qué bien suena, ¿no?
3. Presenciar el nacimiento de cientos de tortugas
¡Tortugas! Ellas son las grandes protagonistas de la vida santotomense. Todos los años vienen a sus playas para poner sus huevos y unos meses después regalan la vista de todo visitante con el espectáculo único que es verlas salir de su cascarón y nadar hacia la orilla. Desde la Playa Grande Príncipe hasta la Playa Micondó en Santo Tomé, estas criaturas marinas se convierten en el centro de todas las miradas llegados los meses de noviembre y febrero. Cuidan tanto a estas pequeñas que se organizan auténticas patrullas para protegerlas de cualquier peligro.
4. Sentirte en Parque Jurásico
Porque viajar a Santo Tomé y Príncipe es sentirse un verdadero explorador en medio de la jungla y lanzarse a conquistar mil rutas de trekking que te lleven por cascadas, acantilados, playas de arena blanca o negra… Es abrirse paso entre palmerales para divisar la frondosidad de la vegetación que inunda Príncipe desde el mirador de Oké Daniel y, en definitiva, ¡es no poder evitar tararear una melodía de John Williams!
5. 4. Contemplar cómo la roca volcánica se apodera del paisaje
¡La lava caprichosa se ha lucido con este increíble paisaje! En este secreto escondido de África la lava volcánica se ha alzado en enormes picos como el Cão Grande y se ha asomado a playas de arena fina como Praia Piscina para regalarle a tu cámara escenarios verdaderamente únicos. Desde escuchar el rugir de los bufones volcánicos en la Isla de Rolas, hasta admirar el choque de las olas contra la calzada de basalto de la Boca do Inferno, la lava ha hecho de Santo Tomé y Príncipe un auténtico espectáculo.