Fani, la concursante de «La isla de las tentaciones» que sorprendió al inicio del programa de Telecinco por no saber quién es su padre («uno de los Chunguitos o de los Chichos»), arrastra un duro pasado que ha conformado su personalidad actual. La pareja de Christofer ha cometido la primera infidelidad del programa tras su idilio con Rubén, unas imágenes a las que su novio ha tenido que enfrentarse ante las cámaras.
Este fin de semana, «Viva la vida» indagó en el pasado de la pareja, que residió durante un tiempo en Sevilla. Como aclaró su tía, Mayte, Fani viene de una familia «desestructurada» y no pudo crecer junto a su madre por distintos motivos. «A saber de quién soy», dijo en su vídeo de presentación refiriéndose a su padre.
Como aseguró la tía de la concursante, «Fani lleva una mochila muy pesada para su edad. No ha tenido una vida fácil, es una chica muy trabajadora y siempre ha tirado del carro. Su madre tuvo que dejar a las niñas y se tuvieron que separar, así que cada hermana estuvo viviendo en un lugar diferente», aclaró Mayte. Según su familiar, la joven sigue buscando su camino. «En su vida hay mucho dolor», aclaró.
Infidelidad
Durante el debate de «La isla de las tentaciones», Mayte no dudó en justificar la infidelidad de su sobrina: «Él puede decir misa, pero conoce perfectamente a Fani. Christofer puede llorar mucho a veces, pero las cosas a veces no son como parecen», comenzó relatando. Maite aplaudió el comportamiento y carácter de la pareja de Fani. «Christofer es un chico estupendo, muy tranquilo», pero matizó después: «Excesivamente tranquilo». «Christofer conoce perfectamente a Fani, y sabía que Fani venía con una pequeña inestabilidad». Y, al ser preguntada por Barneda, comentó que el motivo era «la monotonía». «Fani estaba cansada de tirar del carro, de ser ella siempre la que trabaja, la que lleva todo. Y llega un momento en el que estaba muy agotada», destacó.