El «cansancio» llevó a José Pinto, uno de los miembros más reconocidos de «Los Lobos», el aclamado grupo de concursantes de «¡Boom!», a abandonar el programa de Antena 3 que presenta Juanra Bonet tras casi dos años y 350 entregas formando parte del espacio.
La polémica partida de José Pinto dejó al resto de «Los Lobos», Erundino, Valentín y Manu, a su suerte en «¡Boom!», donde han seguido cosechando éxitos gracias a un nuevo integrante, Alberto Sanfrutos.
Casi una semana después de su abandono, el concursante explicó su marcha de «¡Boom!». En una entrevista con MARCA, el ganadero ha explicado esos «motivos personales» que le llevaron a abandonar. «La motivación es el reto personal de aguantar. Llegar a 100 programas, batir el récord mundial... hay varias cosas que te van motivando a continuar, pero el cansancio se va acumulando. No dejar colgado al equipo es otra motivación. Hasta que llega un momento que piensas: “¿Si me voy, dejo colgado al equipo? No, le ponen un sustituto”. Pues mira, me voy», explicó José, que incidió en que ese «cansancio» fue uno de los «factores» principales en su adiós. «Han sido casi dos años y medio con dos trabajos, uno en el pueblo y otro en Barcelona, que es un palizón de viajes, de horas de grabación...».
Ahora, más de un mes después de su partida, José Pinto ha rehecho su vida sin «Los Lobos» y sin «¡Boom!», el programa que le llevó a la fama. Al dejar el concurso presentado por Juanra Bonet, el ganadero ha podido retomar su oficio y cuidar de sus animales, a los que tenía que dejar a cargo de un amigo cuando tenía que viajar a Barcelona a grabar el programa.
«Yo mismo elegí vivir en el campo y mi profesión. El pueblo es otra escuela, a los niños de hoy no se les deja hacer nada. Hoy en día los niños no tienen su mundo propio y lo tienen que buscar dentro de las máquinas y las pantallas», ha dicho José Pinto en declaraciones a «La nueva España».
«Muchos viven del concepto del paleto de pueblo y llevan a los niños a estudiar a las ciudades pero igual la solución es que los niños de las ciudades vengan al pueblo», criticó el exconcursante de «¡Boom!», habitante de Casillas de Flores, de Ciudad Rodrigo, y un cinéfilo y lector empedernido.